La división histórica en etapas o periodos es una herramienta fundamental para poder crear un conocimiento que pueda ser didáctico y usado con soltura por expertos o cualquier interesado. La historia antigua o del mundo clásico se extiende por el tiempo y los territorios de una forma muy amplia: desde la Edad del Bronce hasta el siglo V d.C. y desde Asia, a Europa y África. En ese mundo se dan un número alto de culturas que agrupamos como “mundo grecolatino”, pero cuya evolución y procesos de cambios son propios, aunque terminen perfilando lo que hemos llamado “pasado clásico” y del que somos heredados en muchísimos aspectos: cultura, derecho, lengua, estilística, simbología, etc.
A continuación vamos a hacer un resumen de los principales periodos en los que se divide la compleja y rica historia grecolatina, atendiendo a algunos de los cambios más notables a nivel social, económico, político y cultural.
Grecia
1600 – 1200 a.C. – Cultura palaciega micénica: caracterizada por enormes complejos palaciegos amurallados (Micenas, Pilos o Cnosos) y monumentales tumbas de cúpula. Tenemos información de estas poblaciones a partir de las tablillas del lineal B, los cantos épicos homéricos y, en especial, por los restos arqueológicos.
Puerta de los leones de Micenas
1200 – 900 a.C. – “Siglos oscuros”: coincide con el paso de la Edad de Bronce a la Edad de Hierro y su denominación nace de una serie de ciudades destruidas y de un “silencio” en las fuentes de información.
siglos VII – VI a.C. – Época arcaica: los núcleos urbanos se convirtieron en asentamientos consolidados y se mejoró la producción artesanal, además de conseguir logros en arquitectura, navegación y técnica militar. Se inicia el proceso de colonización griega a lo largo del Mediterráneo, se desarrolla la escritura griega y surge la tiranía como una forma de gobierno, aunque de corto recorrido. Alrededor del siglo VII a.C. se produciría el surgimiento de las polis o ciudades-Estado, principal forma política y de organización de la Antigüedad griega.
«Copa de Néstor» encontrada en Nápoles. Uno de los testimonios más notables de las colonizaciones griegas por el Mediterráneo
s. V a.C. – Época clásica o siglo de Atenas: esta da comienzo con las Guerras Médicas, que propician la ascensión de Atenas a potencia marítima de primer orden y el desarrollo y consolidación de la democracia. Culmina con las Guerras del Peloponeso. En la obra del historiador Tucídides este periodo se denomina Pentecontecia.
Vista de conjunto de la Acrópolis de Atenas cuyos principales monumentos fueron construidos durante el periodo clásico
338 a.C. al 146 a.C. – Época helenística: se inicia con la firma del tratado de Corinto (338 a. C.), por el que Macedonia pasaba a controlar la Federación Panhelénica y se desarrolla bajo los gobiernos de Filipo II de Macedonia y Alejandro Magno. Tras la muerte del último se viven las guerras de los diádocos y la formación de los distintos reinos helenísticos (Egipto, Siria y Mesopotamia) que fueron posteriormente anexionados por Roma. El fin de denominada “etapa griega” de la historia llega con la conquista romana de Corinto.
«Tumba de Filipo II»
Roma
753 a.C.: fundación legendaria de la ciudad de Roma. Sus primeros habitantes fueron pastores y agricultores que se confederaron en la liga de las Siete Colinas.
753 – 509 a.C. – La Roma monárquica: Roma fue gobernada por los siete reyes, que tienen una parte de leyenda y otra de componente histórico. Estos fueron: Rómulo, el fundador; Tulio Hostilio, el rey guerrero; Anco Marcio, representa el equilibrio; Tarquinio Prisco, el gobernante constructor; Servio Tulio, legislador y reformador; Tarquinio el soberbio, cuya actitud despótica y tiránica acabó con la caída de la monarquía.
509 – 27 a.C. – La República: se crearon de forma gradual una serie de instituciones de gobierno representativas. Las instituciones principales fueron los Comicios, las Magistraturas y el Senado.
desde el 27 a.C. – La Roma imperial: Augusto establece el Principado, en el que los emperadores o princeps concentraron todos los poderes. Aunque no desaparecieron ni el Senado, ni otras instituciones republicanas, como las magistraturas y los comicios, estas estaban controladas por el emperador, que ocupaba el cargo de forma vitalicia y nombraba a su sucesor, formándose dinastías.
Ara Pacis de Augusto
siglos I y II d.C. – Alto Imperio: periodo de relativa tranquilidad denominado desde entonces como «pax romana». Durante este tiempo hubo un importante desarrollo de la economía, de la cultura y de la vida ciudadana. Los pueblos conquistados fueron adoptando la lengua (latín) y las formas de vida propias de los romanos, las ciudades se llenaron de grandes construcciones y obras públicas, y se extendió el derecho de ciudadanía romana (en 212 el emperador Caracalla lo concedió a todos los hombres libres del imperio).
Detalle de la columna de Trajano
siglo III d.C. –“Crisis”: el Imperio había pasado por guerras civiles y el gobierno de los “emperadores soldado”, lo que va a dar a una etapa de caída económica. En los últimos años el emperador Diocleciano puso en práctica una serie de reformas, instituyendo la tetrarquía, un modelo de gobierno compartido por dos emperadores, con el propósito de mejorar la administración imperial. Para hacer frente a la crisis económica y social fijó precios máximos a los artículos.
siglo IV d.C. – Tardoantigüedad y final de la Antigüedad: Constantino dio un giro radical al conceder la libertad a los cristianos. Pero en el campo las revueltas campesinas proliferaron, muchas veces amparadas en movimientos religiosos de tipo herético. La presión fiscal del Estado era insoportable. Las clases sociales casi se habían convertido en castas, pues no existía la menor movilidad social. A la muerte de Teodosio, a finales del s. IV, el Imperio Romano se dividió en dos: Oriente, con capital en Constantinopla, y Occidente, que tenía como centro a Roma. La zona oriental, de base griega, da paso al imperio Bizantino. La zona occidental apenas sobrevivió un siglo, hasta el 476.
Mosaico de Constantino en Hagia Sophia (Estambul)*
Bibliografía
Barceló, P. (2001). Breve historia de Grecia y Roma. Alianza Editorial, Madrid.
Lane Fox, R. (2008). El mundo clásico: Epopeya de Grecia y Roma. Crítica, Barcelona.
Lefebvre, S. (1997). Historia de Roma. L’Antiquité Classique. Vol. 66.
*De Byzantine mosaicist, ca. 1000 – The Yorck Project (2002) 10.000 Meisterwerke der Malerei (DVD-ROM), distributed by DIRECTMEDIA Publishing GmbH. ISBN: 3936122202., Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=148609